lunes, julio 30, 2007

Si, respiro y me alegro

Mientras en el televisor (dispuesto estratégicamente al lado del computador) aparece Johnny Deep en Pánico y Locura en Las Vegas (esa cosa hecha cine de Terry Gilliam basado en una crónica del maestro Hunter S. Thompson) y la noche avanza sobre la ciudad de Santiago, no puedo dejar de sentirme contentito por el extraño giro de las circunstancias y, aunque como saben amigos que todo esto es más mentira que verdad, la suave y tibia sensación de que porfin, por fin.

Nop, eso sonó a alucinación. Y seré cualquier cosa menos un alucinado.

Hay algo de tristeza por la muerte de Fontanarrosa, porque siempre es malo que los que deben vivir mil años tengan que irse así, de repente (y gracias a Mouat y Hervi que escribieron cosas que me hicieron llorar); y al mismo tiempo hay algo de simpleza en el aire frio de la mañana y todas las manos que se dirigen hacia sus trabajos y yo en medio, yo yendo hacia allá.

También es encontrar gente ad-hoc, como unos compañeros de trabajo que se parecen a los pingüinos turbios de Madagascar (sí, queridos, me pegué con esos maravillosos), y que se visten de abrigos y pantalones y vestidos negros. Y también es saber que en vez de almorzar puedo ir a practicar algo de golf, que es como un hoyo en el espacio tiempo y no hay nada que relaje más.
Y por otro lado la alegría de que la ansiedad (esa vieja amiga que me persigue como buen neurótico) se está quedando sola en un rincón, porque ya no tiene sentido, porque me limpié de muchas cosas y soy responsable de mis errores y que no hay cabida para andar llorando por las esquinas por cosas que no me deben importar (y sin embargo siempre estarás ahí, querida, siempre pensaré en tí, ahora que ya no duele tanto).
Y también que me siento bien, me siento pleno a mi edad, que respondo las preguntas con simpleza, que sonrio cada vez más.
Y también porque caminé por Santiago con mi padre y fue verlo de menor edad, mostrándome donde vivía, donde trabajó, en los lugares que tienen (para siempre) un lugar en su cabeza de profesor y que yo allí, bendito, pude verlo a través de sus ojos.
Ah, y porque me hice mi propio personaje de los Simpson, je.
*Oh, felicidad, tan simple y tan lejana. Hoy es tiempo de reir.

11 Comments:

Verónica said...

Alucine no más, estimado, que nunca es malo creer que vemos aquello que sentimos que jamás estará frente a nuestros ojos.

Te cuidas.

Alejandra said...

Jajajaja, mis amigas se ríen porque yo "sonrío y saludo" a los que me caen mal, pero es buena táctica, en verdad funciona.
También traté de hacerme una carita de Los Simpsons, pero me ganó la impaciencia y aborté la misión...
Saludos.

Hiro Nakamura said...

Verónica Reyes: Tal como dijo Leonardo (ese tipo que pintaba y dibujaba con las dos manos), todo es un asunto mental. Actitud que le llaman.
Sigo siendo pesimista, pero no es malo darse un respiro para poder despedazar a los imbéciles de siempre.

Alejandra Gatúbela: A los que me caen mal no los pesco, pero se me nota a la legua el desprecio. Sigo intentando la táctica del "sonrían y saluden". Hasta que me salga natural.

Cecilia - Titi said...

Me gustó leerte,
bien entretenido y auténtico
"Me siento bien, me siento pleno a mi edad"
No todos se sienten así.

Saludos,
Titi

Hiro Nakamura said...

Amigo y maestro Don Patto: siempre se agradece su sabiduría, que aunque viene de alguien de mucha menor edad que yo, siempre he sentido que la relación edad/experiencia está un poco cargada a su lado.
Titicandia: Emocionado, leo tu post y me sorprendo de que haya alguien que me encuentre entretenido (eso siempre hace cariños en el alma y de eso tenemos necesidad).
La visitaré y prometo posts numerosos.
"Pleno a mi edad", sip, puede ser, creo que mejor lo llamo "un rato de felicidad".
Saludos

Ilustre hijo de la maestranza San Eugenio said...

Changos, es como bailar con la hermana, acompañar al amigo con su polola y que te encachuflen a la amiga; como besar a la mujer de tu vida y que tenga halitosis; salir como campeón a estadio lleno después de una jugada soberbia y caer de bruces frente al estadio, eso es para mi ver el video que hoy está en su videoteca en español coñudo, joder me cargan las traducciones al español.
¿ha escuchado el padrino al español?, no me joda es horrible.

Un abrazo mi amigo y aquí le tengo una etiqueta negra que bien le gustaría bajar.

Anónimo said...

HOLA HERMANO
TANTO TIEMPO SIN SABER DE UD:
POR FAVOR DAME TUS COORDENADAS PARA ESTAR EN CONTACTO..
ORLANDO EX FUTI FUENTEALBA

Anónimo said...

HOLA HERMANO
TANTO TIEMPO SIN SABER DE UD:
POR FAVOR DAME TUS COORDENADAS PARA ESTAR EN CONTACTO..
ORLANDO EX FUTI FUENTEALBA

Hiro Nakamura said...

Orlando?
Futi?
FUUUTTIIIIII
Master, amigo, socio, hermanooo!!!
Justo ayer me pillé al choclo Garrido en la calle !!!
Y ahora vos, querido amigo !!!
Que buena. Que buena.
Oiga, mi mail y msn: pilocatabasis@hotmail.com

Pa que nos conversemos un rato.
Y ahí tendremos tiempo para hablar de estos 10 años de silencio.

Un abrazo.

Claudio

Dali said...

AMIGO MIO...apenas abrí mi correo salto estrepitosamente el tuyo, y no te imaginas lo que me alegró. QUE BIÉN QUE ANDES FELIZ POR LA VIDA, POR FÍN!!!!!( siempre la luz nos cobija con su calidez desde algún rincón).Te pienso mucho, recuerdo nuestras últimas conversaciones y las agradesco,un beso y un abraso inmenso, cuidate...siempre tuya, LORENA
P.D. en cuanto al Simpson eres tú a los 21 años, pero bién por el intento.

Anónimo said...

El destino esta hecho de casualidades, como esos clichés viejos de los que deseamos apartarnos violentamente pero siempre terminan configurando el secreto corazón de nuestros discursos. Buscandola a ella, como siempre, me encuentro con tu Blog. Todavía recuerdo una conversación que tuvimos en las afueras de la Biblioteca Central, allí nos odiamos cordialmente, cómo sólo se odian dos caballeros que aman a la misma mujer. Todavia la amo, todavía la amamos. Y la ninfa veleidosa se deleita, como siempre, en el juego circular que trazan los destinos... eterno retorno de las casualidades. Tú lo sabes, ella tiene en los ojos la fatalidad. ¿Y como no amar a la mensajera de la muerte?... claro que probablemente así es como sólo yo la vea, como la sigo viendo. Y buscando, para siempre.