lunes, julio 30, 2007

Si, respiro y me alegro

Mientras en el televisor (dispuesto estratégicamente al lado del computador) aparece Johnny Deep en Pánico y Locura en Las Vegas (esa cosa hecha cine de Terry Gilliam basado en una crónica del maestro Hunter S. Thompson) y la noche avanza sobre la ciudad de Santiago, no puedo dejar de sentirme contentito por el extraño giro de las circunstancias y, aunque como saben amigos que todo esto es más mentira que verdad, la suave y tibia sensación de que porfin, por fin.

Nop, eso sonó a alucinación. Y seré cualquier cosa menos un alucinado.

Hay algo de tristeza por la muerte de Fontanarrosa, porque siempre es malo que los que deben vivir mil años tengan que irse así, de repente (y gracias a Mouat y Hervi que escribieron cosas que me hicieron llorar); y al mismo tiempo hay algo de simpleza en el aire frio de la mañana y todas las manos que se dirigen hacia sus trabajos y yo en medio, yo yendo hacia allá.

También es encontrar gente ad-hoc, como unos compañeros de trabajo que se parecen a los pingüinos turbios de Madagascar (sí, queridos, me pegué con esos maravillosos), y que se visten de abrigos y pantalones y vestidos negros. Y también es saber que en vez de almorzar puedo ir a practicar algo de golf, que es como un hoyo en el espacio tiempo y no hay nada que relaje más.
Y por otro lado la alegría de que la ansiedad (esa vieja amiga que me persigue como buen neurótico) se está quedando sola en un rincón, porque ya no tiene sentido, porque me limpié de muchas cosas y soy responsable de mis errores y que no hay cabida para andar llorando por las esquinas por cosas que no me deben importar (y sin embargo siempre estarás ahí, querida, siempre pensaré en tí, ahora que ya no duele tanto).
Y también que me siento bien, me siento pleno a mi edad, que respondo las preguntas con simpleza, que sonrio cada vez más.
Y también porque caminé por Santiago con mi padre y fue verlo de menor edad, mostrándome donde vivía, donde trabajó, en los lugares que tienen (para siempre) un lugar en su cabeza de profesor y que yo allí, bendito, pude verlo a través de sus ojos.
Ah, y porque me hice mi propio personaje de los Simpson, je.
*Oh, felicidad, tan simple y tan lejana. Hoy es tiempo de reir.

martes, julio 17, 2007

¿Aló, Houston?

Estos días de finde largo, que me traen con la sensación encontrada de tiempo perdido (y alto costo relacionado) y de la posibilidad de salir de los compromisos contraidos, me han servido para ponerle un poco de parelé luego de la primera semana de trabajo de oficina y de un puto resfrío que se autoinvitó y se quedó en casa por al menos una semana.

Sin embargo ya está, ya entregué los textos prometidos, he sido amable y me he reido de varios chistes fomes. Cosas de la responsabilidad.

Así que ahora me quedó tiempo como para hacer las cosas que me gustan, y que nos reunen queridos amigos, en este foro.

El asunto es que ya es tarde y debo descansar, así que me las doy de flojo y resumo la semana, que ha estado movida.

- Ví Madagascar y quedé extasiado por mis alter egos: los pingüinos turbios. En especial con Rico, el que prepara sushi. Geniales. Si hasta he pensado seriamente cambiar mi nick al de Complot Penguin. Por mientras, seguiré la sabia máxima "No se preocupen, sólo sonrían y saluden, sonrían y saluden".

- Me enamoré de Azumi, la japonesa más ruda y bella de los últimos tiempos. Si creen que la Zhang Zi Yi la llevaba, veanse la película de la exquisita asesina. Sorry Missa Hayase, soy un cerdo infiel, pero ya sabías de la existencia de Tifa y de Aki Ross.

- Debido a la necesidad de almorzar rico y barato he mejorado, de manera notable, mi capacidad de cocinero. Y aunque siempre me he jactado de tener buena mano, pues, ahora la estoy reventando.

- Un gran abrazo a mi super amiga Sandra (la Shica), por ser tan top. Todos deberían tener una amiga como ella. Como para creer en la humanidad.

- Fui al cumpleaños de mi hermana y bailamos hasta que nos dio puntada. Y como andaba resfriado, nada mejor para combatir el virus que una buena pankeada.

- Anda mi padre por Santiago. Hay que decir que el muchacho es como Bach, nunca se mueve de su casa ni para los tsunamis, así que el hecho de que viaje es un evento de estudio. De todas maneras buena onda poder verlo, yo que soy como Haendel, un errante.

- He vuelto a practicar mi deporte favorito. Justo a media cuadra de la oficina hay un sitio de práctica, así que top, a ver si mejoro el swing y este año obtengo mi tarjeta.

Finalmente, un chiste totalmente geek, pero que me dejó el saborcito de los buenos juegos de palabras, es decir, que te masajean la materia gris:

- Un ángel se acerca a Dios y le dice "¡Padre, los hombres han descubierto el Genoma humano!"

- Dios, visiblemente enojado golpea la mesa y responde ¡Malditos hackers, voy a tener que cambiar el password!

*Besos para todas, de nuevo, je. Ando optimista así que agarrarse a fin de mes. Ah! muchas gracias a todos/as que me han pescado con mi blog y que responden mis comentarios en los suyos.

miércoles, julio 04, 2007

Correo desde la interzona

Estoy cansadito. Esa es la palabra, cansado.
No cansado por la puta realidad y su maldita injusticia intrínseca. Nop. Estoy cansado de cansancio.
El asunto es que un amigo me pegó una ayudada (de esas que sirven), y ahora estoy con trabajo, horario y jornadas corporativas reguladas por el relojito y los inútiles sirvientes sonrientes de RRHH.
Pero qué le voy a hacer. El cebo era jugoso, y como buen lobo solitario (a pesar de que sabía a qué me enfrentaba) pues bien, que le metí mano y engañé a los "tomadores de decisiones". Je.
Los engañamos de nuevo, como decía mi amigo Tito.
Sin embargo, a pesar del sueño, procedo a resumir las pasadas semanas y los eventos que han marcado la agenda:
- Primero, me pegué el salto y cambié el diseño del blog. ¿Está bonito, no? Le faltan detalles y un mono arriba, pero igual estoy contentito y orgulloso.
- Me reencontré con Kandinsky y Kokoschka. Neo-impresionismo y Neo-expresionismo. Maestros. De esas cosas que nunca haré. Malditos ellos.
- El amor revolotea a mis amigos y amigas. Un par de ellas, que estaban con la telaraña en proceso de crecimiento, ahora andan re contentas. Otros amigos, están consolidandose. Otras, se pusieron de buenas y todo bien.
- Eso, que tengo pega, sueldo y beneficios. Me estoy volviendo solvente. Esto es sospechoso.
- Mi hermana, que es algo así como la bomba de neutrones en versión femenina, está haciendo de las suyas (mientras mi sobrino sigue creciendo) y ya llevamos un par de entrevistas para un piloto de tv.
- Me he agarrado la guata de risa gracias a las gracias de las Mujeres Chilenas de 30, una comunidad activista y, por sobre todo, intrínsecamente lasciva. Top ellas. Se las recomiendo, en especial la elección del Príncipe Blog 2007. Una lección de socio/sicología femenina que ya se la quisieran en las universidades.
- Descubrí las diferencias entre las versiones para PC y para PlayStation de GTA. No estoy tan loco, lo que pasa es que son versiones complementarias. Uff.
Ahora hay que descansar. Ya tengo el tema del próximo post. Pero eso será el fin de semana. Luego del cumpleaños de mi hermana.
*Abrazos a todos, besos a todas, je. A ver si celebramos en patota a fin de mes.

sábado, junio 23, 2007

Pum! right between the eyes

Bonita pregunta la que salió de entre la circunvolución luego de ver un capítulo de una de las dos series que me tienen ensañado y antisocial: Héroes (la otra es House M.D.), y es exactamente la definición de lo heroico, de cómo es ser un héroe.
Ya, podemos ir a Wikipedia ("..una persona normalmente se convierte en héroe al realizar una hazaña extraordinaria y digna de elogio... Las hazañas tradicionales son exterminar monstruos y salvar a gente de una muerte segura... A veces una persona real puede alcanzar suficiente prestigio como para convertirse en un héroe en la mente de la gente"). Pero es aburrido, y no es exactamente lo que busco.
Acerca de esto, hace algunos años, mientras vivía con la que era (en esa oportunidad) mi pareja, ocurrió que descubrimos un robo inmenso de plata por parte de los administradores, en colusión con los directivos de la comunidad del edificio. Ella tomó el toro por las astas y, asociándose con otro vecino re empeñoso y buena onda, hicieron la campaña, lograron echar a los directivos podridos y acusaron ante la justicia a los administradores ladrones.
Como periodista, además de observar y toma nota, decidí ayudarles tanto en la cruzada para echar a los cumas y después en su gestión como directiva. Fue ahí que me salió la explicación, que algunos años después me serviría para analizar un par de cosas que me sucedieron.
Me explayo. Estamos que los actos heroicos suceden en situaciones límite, en decisiones que exigen sacrificio y, especialmente, pasar por sobre temores y normas para lograr un fin mayor. Pero son "actos", es decir, son actitudes que surgen cuando el diente es feroz y es necesario ponerle la cara a la parca. No hay tal cosa como una "vida heroica" o una "persona heroica" cien por cien. No. Son las circunstancias las que generan al héroe. Si no imaginen qué hacía Aquiles mientras no estaba en combate (sirviéndose a algún efebo, seguramente, mira que estos griegos la llevaban si hablamos de desgenereques).
Entonces, tenemos que la gente puede ser heroica y hacer la diferencia. Pero cuando termina la circunstancia volvemos a nuestra situación cotidiana, al día a día.
Y ahí está la explicación, por ejemplo, de nuestra desazón luego que le ganamos al viejo y volvimos a la democracia (fueron generaciones de héroes que, de repente, se quedaron sin objetivo); de que cuando esa directiva de la que cuento este cuento, tuvo que enfrentarse a la cobranza y a la administración quedaron destrozados y maltrechos; de que en cierta ocasión una amiga (a quien todavía quiero mucho) me sacó de su vida, simplemente porque me necesitó como héroe, pero después comenzó a buscar algo normal, alguien normal.
Los otros, los normales, son los que denomino alegremente como “operadores políticos”. Son los administradores de la vida cotidiana, los que se preocupan de las cuentas, de obtener cosas de la vida con un esfuerzo diario, son en suma, quienes se encargan del 90 por ciento de la vida.
Fuck!, debo comenzar a pensar de una de las dos formas, porque si no estaré perdido. Ser heroico implica andar buscando problemas y ser un político es entero de fome. Sin embargo, ser periodista tiene su lado malvado (el evil twin): eres un observador, y como tal estás fuera de la esfera, o sea en la tercera vía.
¿Héroe o político? Buena la tengo.


*Gracias a toooodos por sus amables comentarios sobre estos blogges. Pronto tendré el horario ocupado, pero todo bien. Fuck! tengo que hacer miles de trámites.

martes, junio 19, 2007

Así me gustaría que fuera

Por fín la encontré.
Pura reminiscencia, puro sentimiento y eso que se parece a una tibia y suave caricia. Cachureando en yutub me encontré la famosa segunda parte del capítulo 36 de Robotech, ese en donde Lisa Hayes le declara su amor a Rick Hunter. Chupalla.
Ya había escrito sobre Lisa Hayes en un post de hace tiempo (verlo si quieren) y sigo igual de enamorado de ella. Tan linda que la han de ver.
Así que acá está, en toda su belleza, en un culebrón que, por suerte, dejó a la babosa de Minmay con los crespos hechos. Je.
Dato freak: cuando llegué a Santiago, tuve un colega que estaba enloquecido con Linn Minmay, si hasta tenía sus discos traidos desde Japón y descansos de pantalla con ella y esas cosas. Las discusiones a la hora de almuerzo eran de lo más entretenidas. Ahora él es un alto ejecutivo de una empresa tecnológica. Yo, bueno, yo ahora escribo en un blog. Ja.
Otra cosa. Como los hombres somos unos niños crecidos, no es necesario que se peguen la lata de verlo completo. El objeto del blog está en la primera parte, el resto es puro placer culpable.

*Como la encontré, terminaré con esta época romántica y me dedicaré a cosas más heavy. Ya verán.

Un minuto de silencio

Esto es lo que pasa cuando uno se pone a ordenar los archivos del disco duro viejo. Y no es una imagen poética, sino que tengo un disco duro del año de la pera y es entretenido re-descubrir fotos y textos.
Este es un poema (el último que hice, luego me di cuenta que hay muchos más que lo pueden hacer mucho mejor) nacido en una época media extraña. Harta noche, poca pega y muchas conversas. Sin duda la factura es pobretona, pero es un lindo recuerdo de cuando había cosas más simples y Santiago se empezaba a acostumbrar a mí.

Se abre el silencio
Nace el ruido del silencio.

Hay un dedo que mágico aprieta el switch
Apagando
Desconectando las luces
El pequeño
Sutil
Mínimo intento



Se detienen las cosas
Y los vasos que caen se quedan en el aire
Mientras en las esquinas nace la maravilla
La cara de ella que me mira
Y yo que la miro
Y el estremecer del corazón
Y dale pensar
Ven y dame un beso
Quiero darte un beso

Y se escucha en este silencio
Algo parecido en tu cara

Y no hay momento más perfecto
Como cuando me miras como atravesándome
Acercando mi nariz para entrar en tu mundo
Y no te niegas
Acerco mis manos a tus manos
Y no hay impedimento
La muralla amable que te cubre
Que nos protege de la lluvia
Que nos abraza
Igual como te abrazo
Y es como el cielo
Es tan delicioso que estemos así
Luego de tanto
Tanto tiempo

Susurro tu nombre
Susurras mi nombre


* Prometo no volver a ser tan flojo como para postear cosas viejas. Je. Gracias a los amigos/as que dejan sus mensajes.

sábado, junio 16, 2007

Fuck !! Refuck !!

Limpio ya de la rabia que me tuvo en silencio por la semana y media que pasó, procedo a compartir mi terapia de sanación, basada en las inteligentes palabras de mi abuela Olga y de un par de tripulantes de pesqueros, quienes me enseñaron el mantra de que I) no hay nada, nada importante, a menos que lo sea; II) si no te estás muriendo, todo tiene solución y que III) llegado el momento hay que agarrarse bien los pantalones y aguantar no más.

Todo esto se resume en el "Fuck!" que se me pegó últimamente, y que repito para protegerme de los designios. Aquí un resumen de ellos.


- Amable, le ayudo a la amiga a trasladar sus cosas (y las de su hija) al depto de su nueva pareja. En medio del arrastre y la carga, que escucho "Oye papá", y caigo que es mi amiga (que se las da de moderna y top y Cerveza Capital y Peluquería Francesa) que le dice así a su eventual amor. Fuck! qué mentirosa. Refuck! él le dice mamá. Está claro el tipo de relación.


- En medio de la búsqueda que mi padre se acerca y me comienza a hablar de la vida y de las responsabilidades y de la situación de mi propia existencia y otras florituras. En medio del discurso, que sale el clásico acerca de mis debilidades y mis trancas. Fuck! después de tantos años, sigue creyendo que soy un debilucho. Refuck! nunca cambiará de opinión.


- A través de los años me han catalogado de diversas maneras: egoísta, manipulador, frío, inteligente, tierno, comunista, facho, borracho, gracioso, ganso y un sinfín de epítetos que, reconozco, me he ganado de una u otra manera, independientemente si lo merecía o no. Fuck! la bella Gioconda me agregó uno más. Refuck! esta vez no me lo gané ni me lo merezco, qué mierda.


- En medio de la miseria promedio que se aparecen los ángeles de los amigos y me ayudan con su recomendación para un trabajo. Harto inglés y harto escribir, horario de oficina y salario fijo. Fuck! con los clientes que dejaré botados. Refuck! se lo merecen.


- A pesar de todo, siempre hay ganas de reir y mirar la lluvia caer por entre los árboles. Fuck! con los tristes que sólo se quedan en buscar y lamentarse. Refuck! todos tenemos las posibilidades de ser felices y eso no me lo quitarán ni con todas las malas ondas del mundo.



* Un beso a todos. Gracias por los mensajes. Gracias por los posteos.

martes, junio 12, 2007

Roland y el Amadís en Birmania

Seguimos con la revisión de viejos textos. No por un afán melancólico, sino que son tan pequeños y específicos que no cabrían en ningún lado que no fuera este.

A ver si les gusta.


"A las siete y media debo estar en otro lado. Anoto en papeles que, tengo la seguridad, se perderán irremediablemente en algún lado, por ahí, tal vez en los bolsillos llenos de grietas y barrancas de mi abrigo, o en el reino de mi casaca, donde pequeños dragones y duendes, caballeros y doncellas se escudan en castillos construidos con mis notas, papeles y cartas, y usan armas de tinta y ríen y lloran y luchan entre ellos, entre reinos, de bolsillo en bolsillo, capturando la mayor cantidad de espacio, hasta que un ángel pasa y la casaca entra a la lavadora y mis manos sacan y sacan mis notas y mis casetes y mis lápices, mis alambres, piedras y fotos; y salen estos seres colgando de los restos de mis recuerdos y se instalan, como extraños, en los territorios indómitos de mi mesa, listos para organizar torneos y batallas por el control del nuevo espacio; pero allí aparecen los Birmanos, dueños de la selva, entre los bambúes, y los tigres de Bengala y los elefantes y los comandos ingleses que despedazan con sus machetes la tupida selva del sudeste para poder alcanzar el puente del río Kwai y echarlo abajo y huir y romper la monotonía de su guerra insulsa. Pero nada de esa aventura les dura a los intrusos. Porque necesito salir y sentir vivo mi abrigo y vuelven en un confuso torrente a los pliegues de la pesada tela de lana, para que cuando tenga frío meta mis manos en los bolsillos y sienta tu cara sobre el papel Agfa, número dos, semimate y pueda fabular con una sonrisa pensando en qué hidalgo estará luchando en mi billetera por tu nombre, tal vez Lancelot, o Roland, o incluso el Amadís, y derrame su sangre por ti contra el Caballero Negro, dueño de los desesperos y de mis noches sin dormir, y aun así lo haga en vano, porque eres de esa manera, sin el valor de reconocer las heridas que sufren los que tratan de no estar cautivos de ti, de tus ojos de laguna morada y de tus manos de niña, con tu presencia marcándolo todo, y jamás con la conciencia de saber (ni siquiera imaginar) cuántas batallas hemos de pasar hasta que sólo seas el fantasma de un sueño imposible, de un cuento de hadas. Silencio, pasa un ángel. Debo callar".
* Si, el polisíndeton es debido a mi crianza cortazariana. Hay buenas nuevas, así que el próximo post va a ser de esos duuuulces. Besos y abrazos a todos. No se olviden de entrar a mi otro blog, que me está empezando a gustar esto de los mensajes.

jueves, junio 07, 2007

Un viejo poema

Como hay que cerrar círculos (en eso estamos) y la rabia es grande, reencuentro un libro que editamos con unos amigos hace más de diez años y este poema que cae como anillo al dedo.



Jugar al juego del amor
golpeando, golpeando tus puertas
para que salgas con voz trasnochada
y digas: No hay pan duro, vete.
<>
* De vuelta del largo viaje, vamos a hacer cosas maravillosas. Van a ver. Aunque no lo crean, el poema es mío, je.

miércoles, mayo 30, 2007

Otra traición (y ahora con alevosía)

Como todos saben, no acostumbro publicar cosas de otros blogs. Pero en esta ocasión no puedo dejar de hacerlo. Este es un texto que pillé en un blog mientras buscaba unos monos. Lo divertido es que el blog se llama "entrelineas", exactamente una de las formas de escribir que más denosto. Pero bueno.
"La siguiente pregunta fue hecha en un examen trimestral de química en la Universidad de Toledo.
La respuesta de uno de los estudiantes fue tan "profunda" que el profesor quiso compartirla con sus colegas, vía Internet, razón por la cual podemos todos disfrutar de ella.
Pregunta: ¿Es el Infierno exotérmico (desprende calor) o endotérmico (lo absorbe)?
La mayoría de estudiantes escribieron sus comentarios sobre la Ley de Boyle (el gas se enfría cuando se expande y se calienta cuando se comprime).
Un estudiante, sin embargo, escribió lo siguiente:
"En primer lugar, necesitamos saber en qué medida la masa del Infierno varía con el tiempo. Para ello hemos de saber a qué ritmo entran las almas en el Infierno y a qué ritmo salen. Tengo sin embargo entendido que, una vez dentro del Infierno, las almas ya no salen de él. Por lo tanto, no se producen salidas.
En cuanto a cuántas almas entran, veamos lo que dicen las diferentes religiones. La mayoría de ellas declaran que si no perteneces a ellas, irás al Infierno.
Dado que hay más de una religión que así se expresa y dado que la gente no pertenece a más de una, podemos concluir que todas las almas van al Infierno.
Con las tasas de nacimientos y muertes existentes, podemos deducir que el número de almas en el Infierno crece de forma exponencial. Veamos ahora cómo varía el volumen del Infierno. Según la Ley de Boyle, para que la temperatura y la presión del Infierno se mantengan estables, el volumen debe expandirse en proporción a la entrada de almas.
Hay dos posibilidades:
1. Si el Infierno se expande a una velocidad menor que la de entrada de almas, la temperatura y la presión en el Infierno se incrementarán hasta que éste se desintegre.
2. Si el Infierno se expande a una velocidad mayor que la de la entrada de almas, la temperatura y la presión disminuirán hasta que el Infierno se congele.
¿Qué posibilidad es la verdadera?:
Si aceptamos lo que me dijo Teresa en mi primer año de carrera ("hará frío en el Infierno antes de que me acueste contigo"), y teniendo en cuenta que me acosté con ella ayer noche, la posibilidad número 2 es la verdadera. Doy por tanto como cierto que el Infierno es exotérmico y que ya está congelado. El corolario de esta teoría es que, dado que el Infierno ya está congelado, ya no acepta más almas y está, por tanto, extinguido... dejando al Cielo como única prueba de la existencia de un ser divino, lo que explica por qué, anoche, Teresa no paraba de gritar "¡Oh, Dios mío!
Dicho estudiante fue el único que sacó "sobresaliente”
* De ahí publico lo de la contestadora automática del siquiatra, que está de re pelos.

viernes, mayo 25, 2007

Esperando a la policía

"Hasta peleas me ha causado esta discusión. Una vez terminamos a los garabatos con el Mortis, simplemente porque el cree en el placer, y yo no.

Por eso es como extraño que te esté pidiendo esto, amigo, lo veo en tu cara. Con las fuerzas de orden y seguridad buscándome por todas partes y mi maleta bajo tu cama. Pero fue tan rápido como intenso. Y necesitaba tenerla, necesito tenerla, vos me entiendes.

Mi propia crianza siempre me tuvo en las cuerdas. Pero como creo en la coherencia, no tener cosas siempre me pareció lo más normal, lo mejor para ver al mundo a la cara y decirle que nada te debo, acá estoy limpio de cosas y gentes, parado en el borde de este abismo que me ofreces y no me costaría nada dar el paso y adiós mi viejo.

La nada. El vacío. Eso de saber que mi propio y personal camino hacia la perfección, hacia el amor universal, pasaba por no entramparme con las cosas.

Pero bastó que ella me mirara una sola vez, que luego fuera a verla una sola vez y que después nos encontráramos accidentalmente, para que todo estuviera en tela de juicio. Y fue algo orgánico, algo que se incrustó en las visceras, en donde todo era la necesidad de poseer, de tenerla, de saberla acá, a mi lado, de protegerla. Y fueron también el sueño de casa y auto, de niños corriendo en el patio y fines de semana de alegrías. Todo ello que bendice a los que nos rodean, pero que yo no, ni en los más afiebrados.

Ahí entendi a Michael Corleone (vos leiste el libro, no?), y esa salvaje y básica necesidad de ser su dueño, de romperle la cara al primero que te mire, de ser el guardia y no dormir de aquí en adelante, sólo custodiando tu sueño, sólo custodiando tu felicidad.

Porque eso si que no tiene duda posible.

Y entonces estoy acá, con la Gioconda en la maleta, amigo, y ahora resurge el racional, el creyente del sacrificio, y me pregunto si no será como mucho, y todo esto es un puto sueño. Una mentira que a todos nos ataca alguna vez, pero que yo acá, tentado por lo que nunca había sentido.
Igual me la robé. Y ella me miró con su sonrisa de cómplice. Y ella me sonrió con sus ojos de sueño. Y te juro que estos días han sido de los mejores.
¿Pero no será todo una mentira y tendremos que despertar, boqueando como un pez fuera del agua?"
*De "Confesiones de un NeoBudistaZen. Enciclopedia Mundial Brönstein. Concepción, 2543.

jueves, mayo 17, 2007

El libro de las preguntas y las respuestas

Resumen, en términos de ejercicio lingüístico/acción de arte/abandono, de preguntas y respuestas que me han asaltado últimamente. Basado en un juego que me enseñó una buena mujer y que terminó siendo un lindo recuerdo (el juego).

- De las flores que se comen, prefiero el arroz y las alcachofas.
- Arriba, cuando hay calor. Abajo siempre que se pueda.
- PC por sobre Playstation.
- Tus ojos a tu boca.
- Un buen recuerdo a un mal amor.
- Dos amigos fieles a cien conocidos traicioneros.
- Aburrirme con una película mala, a tener que opinar sin verla.
- Correr un riesgo, a rumiar mi torpeza sin haber intentado algo.
- Perder, pero jugando.
- Un buen shoripán a un mal sushi.
- Whisky, Cerveza, Vodka y Tequila, en ese orden.
- ¿Vivir con honor, o morir con gloria?
- Claramente, mejor iluminar que desvanecerse.
- Siempre el que coordina la reunión es quien te traicionará.
- Todo tiempo pasado fue mejor, porque no tenemos recuerdos del futuro.
- Ocurrirán mañana cosas sorprendentes?
- Si, y serán maravillosas.
- Mi amiga Sandra tiene listo todo para morirse al cumplir 40. Yo no pienso morir.
- Mejor pavo que jote.
- Si insistes lo suficiente, un pasaje Conce/Santiago te puede salir por tres lucas.
- Mi sobrino me ha devuelto la esperanza en la raza humana.
- Llamarte Gioconda o Hermione?
- Cable a TV abierta.
- Palta por sobre huevo.
- Marraqueta, siempre.
- Y si inventaran la pastilla para el olvido, se te olvidará todo?

*continuará

martes, mayo 08, 2007

Mi propio Aleph

Otro texto de hace mucho tiempo que, miren las cosas, hace sentido. Si hay un dejo de esperanza, es por que la hay, aunque el mundo sea ancho y ajeno. Sé que se nota la mano de Gurdieff, pero, ¿qué le voy a hacer?. Somos hijos de nuestros libros.

"Hay uno y mil rayos que salen de la bombilla que cuelga en medio de mi habitación. En realidad es la maravilla del electrón (e-) que salta y salta en el filamento que observo tirado en mi pieza, esperando que el bendito tungsteno o el wolframio (W) dentro del nitrógeno (N) se canse y proceda al mortal retorcijo, a girar sobre sí mismo, cual dualidad con la antimateria en su eje de destrucción (e-+e+).
Ese momento es el que aguardo, el instante en que la mismísima materia ya no quiere nada más con esos usos normales, mundanos, y que rechaza seguir sirviendo para cosas tan poco útiles como ser filamento de ampolleta e ilumino a este tipo y las cucarachas que lo rondan y toda su miseria mírenlo ahí tirado con la basura a su costado, sin ganas de apagar la luz, lamentándose de sus miserias, tan rodeado de libros.
Espero poder asistir, ser testigo de la mínima torsión (t->) del metal, del micro segundo (ms) que en cualquier instante (T) me dará la posibilidad de historiar lo único (1), lo nunca visto, conocimiento secreto para las miradas veloces (v->) de la calle, de las micros (476 o 430) o del metro, costumbres de ir y pasar por encima, ir y dejar que lo oculto esté allí, sin escuchar los lamentos de nuestros deudos, de los muertos que se apelmazan en los pavimentos, sin ver la mueca horrible de la cordillera que no disimula tras de la niebla sus ganas de borrarnos del mapa hijos míos venid y vamos todos.
Es la partícula (e-) que agradece el poco tiempo de vida y que sale de la interacción (fuishh) y que agarra directo hacia afuera, apretando a su paso a tantos hermanos que tengo por acá, y salir despedido a millones de kilómetros por hora desde el horno de la estrella y ya estás en la lengua de fuego que no es el fuego que tú conoces, sino que es algo más básico, es lo primero, la mismísima fuerza creadora, la mano de Dios sin duda.
Y ella que sabe que pertenece a otro mundo, que es parte de eso que llaman el sin sentido, mientras viaja velozmente por el vacío y mira que bonito está todo tan lleno de estrellas tan espacio exterior que le llaman (¿y de dónde saqué eso?).
Sí, de dónde saqué eso, saber que no soy más que una partícula acá viajando feliz por el éter, de que hay felicidades mayores que cualquiera que ustedes puedan conocer, que el resumen de la vida puede estar acá dentro de mí, y que por eso vivo menos de un segundo, o un poco más si no es que aparece mi contraparte (e+), la materia que me anula y que me hace ser pura energía (E) por fin gracias a lo de Einstein (e=mc2), tú sabes.
Es en este vagar que giro y giro sobre mí mismo (spin 1/2), como una loca perinola, y a esta gran velocidad (km/h) me doy cuenta de que voy hacia ese punto tan brillantito que ahora comienza a ser azulado y que viene hacia mí creciendo creciendo, y hay muchos de mis hermanos acá, no me había dado cuenta, y ellos también tienen la mirada perdida y sé que están llenos de lo mismo, de pura fuerza divina, de síntesis masiva, de todo en un solo punto.
Ahora veo bien esa bola azul, que ya cubre toda mi visión, qué bonita se ve de acá arriba (de nuevo ¿de adónde saqué eso?). Epa, miren vienen hacia acá varios gordos átomos, qué tal señores, con permiso, permiso.
Bueno, en qué estaba, ah sí, todo el universo comprimido. Como cuando tomas un archivo en el computador y lo comprimes a la mitad, y luego a la mitad, y así a la mitad hasta la eternidad, hasta que no quede más que algo ultra compacto que tiene entidad propia.
Lo siento, siempre me voy en estas voladas, justo cuando aparece el mar, miren el mar le digo a mis hermanas y eso tan gris que debe ser lo que llaman montañas y acá viene el humo, permiso, humo y edificios y miren esa casa un techo, una habitación y mis hermanas que rompen el filamento de una bombilla, que bien saben es tungsteno o wolframio (W) y miren a ese tipo pero si le voy a pegar en la cabeza, adiós, qué locura señor...
En la pieza de un viejo edificio, en medio de la oscuridad un hombre, que resulto ser yo, abre los ojos. No sabe por qué, pero la vida vuelve a tener sentido".

*Seguir los sueños hasta que se cumplan, esa es la idea, no?

lunes, mayo 07, 2007

Vamos a traicionarnos un poco

No es mi costumbre pegar videos en mi blog, pero debido a lo contractual (y a que no viene con la línea editorial de PielUrbana) no pude dejar de postear este bello y youtubiano experimento.

jueves, mayo 03, 2007

Guardian del Abismo Insondable

Esta es una de esas ocasiones en donde se te hace imposible detener la maquinaria y decenas de ideas se encadenan felices. Sucede que me pegué una maratón de Sach Braff (sí, el mismo que aparece en Scrubs) y me enamoré perdidamente de su ópera prima, Garden State.
¿Y cómo sucede eso? Pues bien, resulta que en una de esas noches en que no puedo dormir que prendo el televisor y comienza la película. Tengo la teoría de que hay películas para el cine y otras para el cable, hay algunas que sólo se arriendan y otras pasan a formar parte del disco duro. Pues bien, ésta es una de las nuevas en la colección.
Pero además está la asociación de ideas que me salian por los poros y que tuve que anotar en mi libreta de campo. A saber:
- Toda obra de arte (e incluso cualquier cosa que se le parezca) debe de tener un trasfondo político. Político en el sentido de que el contenido de ella tiene que plantear una opción de vida, una idea de cómo es, podría o debería ser nuestra existencia. Eso significa que si quieres llegar a algo que se acerque (pálidamente) a escribir, filmar o pintar algo como la gente, debes de colocarte ahí, ubicar tu propia realidad y disectarla sin asco. En esta misma película que cuento, Braff narra su propia vida juvenil, sus propias disfuncionalidades y temores, su propia vida de post-niño criado con drogas legales. Eso se agradece por su amabilidad y crudeza. Pero por sobre todo, el que no te entrega soluciones, sino que simplemente dice que lo importante "no es cambiar tu vida, sino darte cuenta que quieres hacerlo".
- Ahora que tengo 38, y varias crisis he pasado, me rio cuando hay sicólogos (esos hombres y mujeres que se creen superiores a nosotros) que dicen que existe una "crisis del cuarto de vida", es decir, eso que nos pasa cuando dejamos la educación superior y debemos batallar por un lugar en el mundo. Ese sería el tema de la película. Pero lo interesante es que el discurso de Braff no sólo funciona para los "adultos jóvenes" (como ese fallido intento que se llamó Reality Bites), sino que es aplicable a niños y ancianos, y en especial a quienes hemos estado en crisis desde los quince.
- Existen diversas formas de llegar a tus propias conclusiones (una de las claves del maravilloso libro de Umberto Eco). Para algunos la solución está en ser analítico, para otros es ligar sucesos diversos en una sola explicación. Independientemente de ello, lo que importa es hacerlo, es lograr un orden que te explique algunas cosas. Y aunque no es una respuesta definitiva, sí es un punto de partida (eso que nos falta en los instantes de crisis).
- Es imperioso tener nuestro propio y personal abismo insondable, en donde podamos gritar y patear, para limpiarnos, sólo para eso.
- Así como le pasó a Alfred Jarry (ese maniaco que inventó al impresionante Ubu Rex), Braff escribió gran parte del guión cuando estaba en secundaria. Y ahí llegamos a un punto clave: toda creación es resultado de trabajo constante, premeditado y conciente. No hay espacio para la "inspiración", que no es más que la palabra que describe el estado de andar con las antenas bien puestas y con el coco poroso. Si vas a escribir (o pintar o filmar o esculpir) hazlo compulsivamente, a cada rato. Si tienes talento podrás aprender los trucos del mago, pero siempre al final lo que queda es lo revisado mil y una veces.
* Parrafada ad libitum sólo porque me encantó la película. Ustedes entienden.

miércoles, mayo 02, 2007

Una vista del continuum espacio/tiempo

Un texto de hace mucho tiempo, que (vaya cosa) no pierde su actualidad. A ver si les hace click y me sorprenden (porque ciertamente no es para una mujer, o sea, sí lo es, pero no es de carne y hueso).



Trescientas noches con sus días demoré en quitarte de en medio. Trescientos amaneceres llenos de vino tuvieron que pasar para detener, alguna vez, el eco de tus labios que siguen y seguirán repitiendo -una y otra vez- algo acerca del sinfín de jornadas soportando nuestros inútiles intentos de tregua, los empeños de calmar nuestras hostilidades con un amable ponernos de acuerdo, sabiendo que se yergue el adiós inevitablemente -aunque no lo quieras-, el que se queda en una esquina de la habitación de mis deseos como una cucaracha silbando en la penumbra los temores que nos llenan, a la vez que estira sus garritas para comenzar a crecer y usar su poder sanador, ese bálsamo que limpia y conforta, esa libertad de no tenerte, de no saberte más.
Un abrazo y decir que te quise y que tal vez nos veamos de nuevo (de nuevo las mentiras), justo cuando aparece la certeza de que los sentimientos se liberan de algo, de algo inexpresable, de esa marmota que tanto tiempo ha dormido en mis intenciones. Tal vez sea el saber que nunca voy a cumplir con tus sueños y tus deseos, o la antigua noción de la inevitable y mortal seguridad de que tú no eras, de que todavía no aparece la ausente, esa mujer de siempre, que no fuiste ni tú ni ninguna que haya aparecido hasta ahora.
Un abrazo y despedirse. Un adiós a una mujer y a su mundo de necesidades, un adiós tanto a la abstinencia de siglos como a barajar la posibilidad de que no me importes, que de verdad me costaba reconocerlo pero me importas un comino y prefiero quedarme así.
Pero por sobre todo alejarme definitivamente del viejo truco de negar nuestro amor propio, incluso los sueños tejidos de obsesión, para aceptar el solapado interés, el verdadero (y también denominado) egoísmo, el puro y duro egoísmo de tu lado de la mesa, ese tuyo tan femenino, ese montón de carne e ideas que demanda que acepte tu dolor (el tuyo) como mío (mi dolor). No sé si me explico. Aceptar tu corazón como mío, como si no tuviese uno, aceptar tu mente como mía, como si no tuviese una, y aceptar -finalmente- tus sueños como míos, como si no tuviese unos cuantos guardados por allí.
Y ahora viene el juego de nuevo. Esa extraña danza de las mentiras que sabes que existen para estos casos, las patrañas históricas, los viejos trucos de payaso. Mirar los ojos que miran a tus ojos y tomar los hombros con un gesto en extremo cuidadoso, ni muy cariñoso, ni muy lejano. Un aire dramático y, justo cuando comienzas el movimiento del poder -ese que te perturba: acercar a la otra persona, haciendo que su diferencia de distancia tienda a cero-, vuelves a saber que nada pasa, que es una costumbre, una maldita ficción, y aunque tratas de decir que esta vez no, esta vez eso tibio de mi pecho tendrá un genuino uso, saldrá como un torrente y entrará en tu cuerpo, y te aprieto y aprieto y nada, absolutamente nada.
Pero allí están esas infinitas conversaciones y las infinitas soledades (que de una u otra forma son más numerosas y más reales que las esperanzas, esas flacas sin sabor), la permanencia de lo que hablas que te empieza a dar vueltas, como la conciencia, con interiores voces a coro de haz lo correcto contigo mismo, y esperas que te empiecen a soltar, que tú empieces a soltar (por un asunto de tiempo interno, de timing natural) y caer de nuevo en el truco del lenguaje para hacer que por nonagésima vez salga el ángel, quien hace que algo-de-en-medio-de-nosotros (de este abrazo) se aleje y nos limpie, y cubra con sus alas la ciudad que se desmorona en mi perdición para que en medio de tu y mi silencio te diga adiós para darme vuelta y salir huyendo, sintiendo que cada día soy un poco más, sólo un poco más desgraciado y que nunca podré ser un hombre normal como esos que te gustan.

martes, abril 24, 2007

Declaración de principios (ampliada)

Decidido a enfrentar la fortuna con la arrogancia de un senador romano, o con el aplomo de un lord, aplico rewind y dejo acá una sección de mi propia, y auténtica, declaración de principios. Como para que nos vayamos poniendo de acuerdo y no se me sorprendan.

Introducción
Todos nacemos más o menos iguales en cuanto a la capacidad de hacer imbecilidades. Hay algunos que son más eficientes que otros, pero al final siempre la estupidez vence. Es por eso que tenemos la tendencia a destrozar nuestro futuro, a dejar que las cosas sean más importantes que nosotros y que tengamos el derecho a endurecer la mollera. En esta lucha de larga data, hemos encontrado potentes y eficientes formas de hacer mejor esta labor.

Principio de Autonomía
Yo no puedo saber lo que piensas, a pesar de que conozca tu comportamiento. Debido a que no tengo superpoderes, es necesario que me digas todo, que me expliques tu mente. Como no puedo ser tú, ni viceversa, nos ahorraremos tiempo, saliva y lágrimas si logramos comunicarnos con la verdad, por más brutal que sea.

Principio de Equidad
Todos tenemos derecho a que nos hagan cariño, a tener un solo y puro momento de tranquilidad y sentir la piel del otro sin mayor apuro que esperar la hora de la cena, el almuerzo o el desayuno.

Principio de diferenciación
Hay tres tipos de personas en el mundo:
- Los que nacen en la luz y son luminosos; son los grandes amigos, los que le dan partida al motor de la vida, como son energía sin control llenan de felicidad a quienes están con ellos. Lo mejor de ellos/as es que no se dan cuenta de que van por la vida iluminando.
- Los que nacen oscuros y aman la luz; somos los más, pobres seres nacidos del barro primigenio, hemos desarrollado ojos para buscar y entender lo bueno de lo bello, de la luz. Enamorados de la luz, vamos por la vida tratando de hacernos merecedores de tanta bendición.
- Los que nacen oscuros y odian la luz; son los imbéciles del cuento, odian lo bello, aborrecen de la felicidad y sólo encuentran un poco de respiro cuando el mundo entra en caos.

Principio de las cosas
Dios existe, el problema es que hizo el universo y se fue de vacaciones.

Principio universal del dolor sin fin
El camino hacia la felicidad es intrincado, tiene curvas y peraltes, subidas imposibles y bajadas en donde hay que enganchar la máquina. Y lo peor es que hay veces que no tiene fin.
El camino del dolor y la pena es directo, carretera exclusiva, sin salidas y siempre llegas a destino.

Principio elemental de la belleza
Lo ético es lo estético, lo estético es lo ético

Principio de desigualdad
Tu placer es más importante que el mío, porque me conozco y sé cómo obtenerlo. Déjame ser un instrumento en tus manos.

Principio de exclusividad
No existe la maldad, que al final sólo es la visión de lo contrario de la bondad. Así como no hay buenos perfectos, no existen los malos verdaderos. Todo lo que nos parecen actos de maldad no son más que insulsos intentos de un imbécil por hacer una estupidez.

Principio genealógico
Si Luis y Mirta son mis padres biológicos y emocionales, Julio y Marguerite son mis padres intelectuales.

Principio de Van Gogh
"La miseria no terminará nunca"

Teorema universal de Silvio
"No amar en seco"

Teorema específico de Silvio
"Los amores cobardes no llegan a amores, ni a historias, se quedan allí"

Tesis del cinéfilo
Grand Moff Tarkin era más malo que Dart Vader. Nicky Santoro es dios. Bruce Lee rules.

Tesis de Kuntsmann
La única mujer que te entiende y te amará hasta el fin es la botella.

Teorema de prioridades cinematográficas I
La mejor película de la historia es Blade Runner, punto. La peor aún está por hacerse.

Teorema de prioridades cinematográficas II
Si no hay un momento que te emocione, la película vale hongo.

Tesis heroica televisiva I
Anthony Bourdain, Dr. House y Hiro Nakamura la llevan.

Tesis post Parodi
"No existe vida alguna en mi cuerpo". Drácula tenía razón, así quedé.

Teorema del sudor
No esperes más de lo que mereces, la suerte no existe. Lo que hay son posibilidades que se abren a tus pies, si eres capaz lo tomas, si no, le echas la culpa a la suerte. Todo lo que te mereces lo empiezas a construir ahora.

Teorema de los años perdidos
Mi vida se mueve en ciclos definidos y que he logrado establecer: 8 años. Cada ocho años me hacen pebre el corazón, cada ocho años tengo la posibilidad de ser alguien, cada ocho años el mundo me deja de lado.

Epigrama de Plaza
"No me pidas más de lo que puedo dar"

*Gracias a todos por la ayuda. Se viene una segunda parte.

lunes, abril 09, 2007

Nothing but the truth

En medio de la tos que me ataca justo en este inicio de Otoño (lamentable que sea así), debo reconocer amigos que, a pesar de todos mis empeños, hoy es uno de esos malos días.
Un mal día para todo.
Fallaron los clientes, falló el clima, y lo que es peor, falló la gente.
De cierta manera, tengo que decirlo, es lo que me esperaba. Había un algo de no te creo, perro, en el aire, y es casi lógico ahora que se cae la noche y espero en mi habitación poder tener tanto sueño como para dormir sin darme cuenta.
Tengo rabia, especialmente, porque caí en una de las trampas que tanto he conocido, y que no es sobre la confianza en los contadores y que cumplirán su palabra, sino en la frase que no se me sale del seso, y que sigue dando vueltas, en especial si son tuyas y nada más que tuyas.
Y es terrible, porque ya me cansé de tratar de leer entre líneas, de andar condescendiente aguantando la falta de frontalidad, el más profundo de los desprecios, que es cuando no te dicen todo lo que te tienen que decir.
Porque así se mueren las esperanzas, esas polillas del alma que andan buscando su fanal en donde quemarse.
Hace muchos años, sin más, decidí que ya era suficiente y que debía tomar algunas cosas por los pelos, así que inventé la frase clave: si vas a escribir, de cualquier forma, hazlo de manera tal que te de verguenza lo que escribiste.
Suena a paradoja, pero en realidad es la única forma que encontré para saber si voy por el camino correcto, si es que vale la pena todo esto.
Pero ¿porqué ahora la rabia de andar diciendo esto acá, en esto que no es más que una bitácora?
Porque necesito repetirmelo una vez más, porque (tal como lo dije) ya basta de andar escondiendose en frases vagas e indirectas que no son más que las formas de andar evitandole el traste a la jeringa. Vamos, que ya está bueno de eufemismos.
Es por eso que declaro mi amor incondicional, es por eso que repetí en el verano, tantas veces, que la dura honradez es lo único que nos salvará, que ya es suficiente de andar leyendo entre lineas.
Sorry, pero es un mal día, y no me dan las ganas de querer sonreir.
*Adios Misa Hayase, fue bueno conocerte

martes, marzo 13, 2007

No women no kids

Esto de escribir es como andar con los bolsillos llenos de balas. Cada vez que caminas, o corres para ir al metro o cuando subes las escaleras, Jacobo, los bolsillos de la chaqueta van con su tlin tlin y me transforman en evidencia viva, un posible asesino que se divierte de ver las caras de la gente en la calle pobres seres bancarios y que no saben el peligro que corren. Igual te sientes secretamente poderoso, dueño de un desconocido tesoro que suena dentro de la ropa y que no es una tarjeta de crédito o una chequera con suave monto para gastar, no es más que eso, ni es menos que eso. Dueño de la vida y la muerte, depositario de sabrosos secretos, el iluminado que ve el mundo desde su atalaya.
Pero es diferente cuando la gente que te conoce, y que son los marcianos que te quieren, y que de una u otra manera es la tribu que haz formado en la ciudad, comienza a saber que eres el amigo que escribe y empiezan a tratarte como si se te notara el bulto bajo la casaca, como si de verdad tuvieses la punto35 lista para disparar asesino, francotirador sin remordimientos, siempre listo a tirar a quemarropa, mirando de reojo en la calle, siguiendo la huella de alguien, de la víctima inocente que está allí en el pasillo de la estación, ridículo en su pequeño mundo, desnudo ante mí, arrepiéntete perro.
Entonces está la desconfianza, sobretodo de los que tienen mucho que perder, los que se han forjado una vida de impresiones, de falsos éxitos, de pobres simulacros de riqueza, y se esconden en la pretensión, en la prepotencia, miserables llenos de temor.
Pero también es perverso esto que he aceptado tan como okey, como natural, no problema. Porque también entro en el juego de verme como desde fuera del partido, pasando las calles y la gente desde adentro de la pecera, siempre con un vidrio entre ellos y mi pequeño y privado mundo de acá adentro, el mismo que intento destruir con mi arma, con la Smith & Wesson.
Y el vidrio se va empañando. Al principio era transparente, y en las conversaciones sin fin con los grandes de juventud comencé a sentir que ya todo comenzaba a rebotar, a perder velocidad cuando se me acerca y que poco a poco me transformo en un espejo, en un envoltorio que refleja, y que no deja pasar, no deja que la luz sea la luz.
Y luego es eso, Jacobo, de andar como pisando algodones y te vas hundiendo hundiendo y no sabes si estás bien o estás mal cuando por las mañanas tratas de levantarte y sientes que todo está bien y guas, que todo viene como una avalancha, saliendo del clóset, colgados de sus perchas y soy yo mismo que nazco una vez más cargado con estas armas, estas balas que a nadie matan pero que me alejan tanto de ustedes si ya ni me nombran ni cuentan lo que les pasó, marcianos, sólo por el temor del gatillo de la palabra de lo que soy.
No women no kids, ja.
*Gracias a Edward por la pintura, je.

domingo, marzo 11, 2007

Sobre el Happy -o- Meter

"Apremiado por la necesidad de poder darle algo de coherencia a su vida, en 2006, el ingeniero inglés Horatio Londonderry, trabajando en una idea presentada en 1980 por los científicos Alberto Maschieri y Jared Guraiman (Universidad de Leipzig, 1976), creó un instrumento que permitiera medir la cantidad de felicidad en las personas".
"Su primer modelo fue un pesado artefacto que más tenía aspecto de manómetro industrial que de un sutil medidor de hormonas en la sangre, pero luego de una asociación con su colega (y aficionado a la electrónica) David Benassai, pudo lograr un modelo que se acerca al actual "Happy -o- Meter" que todos conocemos".

"Su funcionamiento, tal como aparece en el original manual del 2006, se basa en la medición de la enzima Oxitocina, emitida por todo organismo en estado de felicidad. Para ello adoptaron la fórmula de análisis que se aplicaba en los medidores de estado alcohólico (Alcotest, ver en pág 154), en donde basta un soplido para dar una medición aproximada de la ingesta".

"Hasta la actualidad, sin embargo, la brillante imaginación de Londonderry ha sido eclipsada por su trágico fin. Según cuenta en su biografía el premiado siquiatra Otto Cassot, conoció a Londonderry luego de que se volviese obsesivo con el uso de su nueva máquina".

"Ví, en estadios iniciales de su enfermedad, que Herr Londonderry se tomaba una medida de su felicidad cada 15 minutos, todo para ver si ella ascendía, es decir, si se volvía más feliz. Ello no ocurrió, pues es sabido (desde entonces se ha avanzado mucho en esta enfermedad, pero en ese tiempo, pues, había que contentarse con die wenigen werkzeuge dieser zeit) que tras la desaparición de una enamorada, le dio con la maquinita en un inicio, hasta que se transformó en una compulsión".

"La mañana de ese día, prosigue Cassot, intenté un tratamiento de chok (sic) con el paciente, pero no se creyó el cuento de que su famosa maquinita no existía y de que todo era una alucinación. Debí sedarlo".
"En la actualidad el Happy -o- Meter se vende con receta médica y su uso está normado por la Superintendencia de Felicidad, dependiente del Ministerio de Salud".
(De la Enciclopedia Mundial Brönstein. Santiago, 2006)

jueves, marzo 08, 2007

Vincerò

Lo bueno de todo esto, si es que se puede sacar algo bueno de esta época de silencio que está tratando de desaparecer, es que a las finales seguimos siendo los mismos.
Luchamos con una sonrisa en un mundo que dejó de ser lo que creíamos, que le sonrie a los de siempre, y que confía en que seremos felices si le hacemos caso a Forrest Gump (vaya imbécil). Pero no, no estoy en eso ahora, ni siquiera tengo rabia en contra del cielo y su famosa ley de las compensaciones.

"Nessun dorma! Nessun dorma!
Tu pure, o Principessa,
Nella tua fredda stanza
guardi le stelle,
Che tremano d'amore
e di speranza!"

Estoy rabioso en contra de lo que pudo haber sido, del Gojira del que hablé alguna vez, y que se representa claramente en este blog, que de ser una vitrina de mi visión (limitada, egoista y autosuficiente) acerca del mundo, se ha transformado en el resumidero de pensamientos sobre lo que me pasa y que siempre, siempre, termina siendo una lata absoluta.

Y es "lo-que-pudo-haber-sido" una de las bases de la enfermedad que me tiene por las cuerdas ahora, esa "Lomismitis", la inflamación de lo mismo. Porque tuve la oportunidad de cambiarlo todo, y no se dió, no pudo ser.

Y lo peor de esto es que "lo-que-pudo-haber-sido" pasa también por la opción de hacer lo que tengo que hacer, de estar en el lugar en donde debo estar, de seguir siendo coherente. Madurez que le llaman, pero que para mí tiene más olor a superviviencia en el territorio conocido (como un buen mujaidin), que la insoportable responsabilidad de saber que ya pasó un rato suficiente como para hacer algo bueno con tu vida.

"Ma il mio mistero è chiuso in me,
Il nome mio nessun saprà!
No, no, sulla tua bocca lo dirò,
Quando la luce splenderà!
Ed il mio bacio scioglierà.
Il silenzio che ti fa mio!"


Pero ¿sabis?, en el fondo siempre tendré la sensación de que estamos marcados por una inmensa y permanente incerteza, de un temor casi ancestral que nuestros antepasados trataron de eliminar, pero que no les fue dado. Vivimos en medio de dolores inconmensurables, en donde los más aptos pueden sobrevivir, en donde no nos queda más que soportar, aguantar, esperar que todo esto mejore de alguna manera.

Hay quienes tienen un nato sentido de la sobrevivencia, y que además pueden mirar el mundo con un prisma algo optimista. Ya nada de eso me queda, sorry. Pero tal como lo dije alguna vez, sigo acá, dándole a la macana de pegarle a algo bueno y que la brisa nos besará con amabilidad.

"Il nome suo nessun saprà!
E noi dovrem ahimè morir, morir!
Dilegua o notte!
Tramontate, stelle!
Tramontate, stelle!
All' alba vincerò!
Vincerò! Vincerò!"

Venceremos, a toda costa. No dejaremos que todo esto sea más importante que nosotros mismos, no dejaremos que la machina nos chupe el seso y la sangre. Venceremos y veremos el amanecer. Venceremos y las tinieblas dejarán que mi nombre (que el tuyo, Misa Hayase) se vuelvan un suspiro en una inmensidad y deje de sentirme podrido (que es una forma de decir que sería mejor de otra forma, ¿no?).
Por mientras, seguiré acá, construyendo teorías acerca de la vida (que al final es el objetivo de todo buen periodista). Eso denlo por hecho.

*Los monos son del gran Hokusai; gracias a todos por ayudarme en esta época oscura. Pronto habrá nuevas y buenas noticias para todos. Lisa Hayes, espero verte pronto.

sábado, febrero 17, 2007

Mi vida como drogadicto

La Oxitocina es una molécula generada de forma natural por el hipotálamo en la base del cerebro que regula varios procesos fisiológicos como las emociones.


Científicos de la Universidad de Zurich, encabezados por el Dr. Ernest Fehr, han llevado a cabo un experimento en que el simple contacto con una "poción" de oxitocina mejoraba capacidad de los sujetos de confiar en otras personas.
La citada substancia química es capaz de promover la actividad social y según parece ayuda a superar el temor a la traición y crear un círculo de confianza y afecto.

Eso.
*Gracias a Misa Hayase, la responsable de mi adicción, por darme esta lección de vida.

domingo, enero 21, 2007

Epifanías y el vacío que queda

Fue como encontrar una muralla frente tuyo y, ciego y sordo, tratar de buscar a tientas, a golpes de uñas, un lugar en donde poder cruzar hacia el otro lado. Eso, cruzar hacia el lado desconocido, hacia el lado en donde todo es incierto.
Pues bien, hallé el lugar. Como todo un imbécil era una puerta gigante, abierta, inmensa de evidente, y estaba allí.

Pudiste llamarte de cualquier forma, tal como lo dijo una vez el abuelo Julio, pero esta vez prefiero llamarla Misa Hayase. Y fue un día, sólo un día en donde me redescubro simple y contento, abrumado por la luz que se cuela por entre las grandotas nubes de este lugar, el lugar hacia donde he subido para tener mi epifanía, ese regalo que te hace el azar. O más bien fue un rio en donde puedes descansar en una de sus orillas, mientras tienes los pies en el agua y las ramas del protector sauce y su protectora sombra dicen "duerme, dale, que tienes tiempo".
Hubo silencio y cigarrillos, una larga conversación que duró 20 horas. Intercambiamos trucos para jugar San Andreas, pelamos a los conocidos mutuos, compartimos simplemente los objetivos y las definiciones. Y nos acompañamos en un espacio de tiempo perdido que alguna vez tendré que recuperar o pagar.

A estas alturas ya ella se ha ido, y por supuesto la epifanìa desapareció. Y tal como le digo a mi amigo Tito, ahora que me siento como Harvey Peckar, con trabajo simple y bien remunerado y con el tiempo para hacer lo que me gusta, sólo me queda el hoyo negro y profundo acá adentro, ese mismo que nadie entiende porque no lo ven.
Pude escribir de muchas cosas. De los reencuentros, del nuevo trabajo, del puto calor de Santiago en esta época, de la llegada de mi amigo Mauricio y de cómo supe que todo era igual a siempre y que nadie cambia ni un ápice. Pude decir que la tranquilidad y la alegría que me produjo ver de nuevo a mi amiga Ingrid sólo puede compararse con la calma de una caminata por el parque. Pude mentir una vez más y hacer un listado de las cosas que me gustan y disgustan.
Pero luego de subir la montaña, o de estar bajo el sauce (tu entiendes), sólo quedan las ganas de volver y volver y volver, pero es imposible, porque todo el tiempo fue destruido y no tienes el poder de hacer que el espacio y sus once dimensiones vuelvan a ser lo que eran.
Y el problema de las epifanías es que son peores que las drogas. Siempre quieres volver a sentirlas.
*Gracias a los amigos y amigas que me hay sostenido y ayudado en esta época. Las pinturas son de Paul Klee y Jackson Pollock, y perdón si hiero a alguien. (Háganle cariños a Escudito)